martes, 5 de julio de 2011

Kapiii 6 :)

Vane se despertó al sonar su teléfono. Gimiendo en voz alta, ella se dio vuelta para contestarlo.
Era Ashley —Qué tal, Ness. ¿Cómo estás disfrutando tu mañana libre?
Ella estaría disfrutando de ella mucho más si alguien no hubiera interrumpido su sueño mientras estaba intentando encontrar a Zac para poder desnudarlo completamente y arrastrarlo al agua con ella.
—Está bien —dijo Ness, sofocando su agitación.
—¿Te desperté?
—Sí, lo hiciste.
—Oh, lo siento. ¿Estabas teniendo otra pesadilla?
Ness sonrió ante el recuerdo. —No, no una pesadilla.
—¿En serio? —preguntó Ash sin creerle. —¿Ni una muy pequeña?
—Nop. Ahora si me perdonas, realmente me gustaría volver a dormir.
—Sí, seguro —dijo Ash con una extraña nota en su voz. —¿Por qué no lo haces?
Vane estuvo en la cama durante una hora entera, intentando volver al sueño para encontrar a Zac, pero esto no funcionó.
Ella se sentía tan bien desde su tiempo juntos que no tuvo más opción que levantarse.
Irritada por no tener más control sobre su capacidad para volver a dormirse, vagó por toda la casa.
A última de la mañana, se encontró ante su ordenador, mirando fijamente su informe de comercialización.
Mientras trabajaba, las palabras de Zac, sus palabras alentadoras le daban vuelta por la cabeza. Y antes de saber lo que estaba haciendo, cerró su hoja de cálculos y abrió el procesador de texto.
Vane se sentó allí durante horas, tipeando furiosamente. No fue hasta última hora de la tarde que paró.
Completamente feliz por primera vez en años, Ness miró fijamente lo que ella había hecho. Orgullosa de su logro, deseaba compartirlo con alguien.
No, se corrigió. Ella deseaba compartirlo con Zac.
Imprimió las páginas, luego las llevó hasta el sofá. Se acostó, agarró los papeles a su pecho y se ordenó dormirse con la esperanza de verlo otra vez.
Ella lo encontró de pie en un prado. Estaba vestido todo de negro hasta sus botas de motorista de cuero. Sus jeans abrazaban sus duros muslos, y su camiseta negra lucía deliciosa al estirarse sobre un pecho tan delgado y tonificado que sólo podía ser verdadero en sus sueños.
La brisa fresca movía su pelo flojo, y sus ojos plateados brillaban a la luz del día.
—Estaba buscándote —dijo ella feliz.
Él pareció perplejo por sus palabras. —¿En serio?
—Sí.
Ella se sentó en medio de su prado de verano con hermosas mariposas en tonos brillantes a su alrededor. Después de su discusión la última noche, Nessa había estado intentando soltar a su artista interior. Ella llevaba una ligera blusa campesina y una falda floja que subió por sus muslos cuando se sentó.
Lo mejor de todo, fue que ella conjuró una caja de Nutter Butter Bites.
Zac se acercó. —¿Qué estás comiendo?
—Nutter Butter. ¿Quieres unas?
Él se cayó de rodillas a su lado. —¿Qué son?
Ella hundió su mano en la caja roja y sacó un puñado para mostrarle los círculos color tostado. —Galletitas de manteca de maní. Son realmente buenas, y la mejor parte de todo, en sueños, no tienen ninguna caloría.
Él se rió de eso. —¿Me dejarías comer una?
Más nervioso que lo que ella podía comprender, ella sostuvo una galletita para él. Él lamió su dedo al tomar la galletita en su boca. —Es delicioso. Tu dedo, quiero  decir.
Ella le sonrió y lo besó en la mejilla.
Él pareció tan atónito que fue cómico.
—¡Hey! —dijo ella, dejando de lado la caja y agarrando los papeles que había traído con ella. —Estarás orgulloso de mí.
Él arqueó una ceja.
—Hoy escribí. Por primera vez desde la universidad.
—¿En serio?
Ella cabeceó. —Casi tengo terminadas diez páginas. ¿Quieres ver?
—Por supuesto que quiero —. Él tomó las páginas de sus manos y se sentó frente a ella para leerlas.
Ness observó su mirada barriendo la página. Ansiaba extender y pasar sus manos sobre su cuerpo glorioso. Él era musculoso como un atleta. Mejor todavía, su gusto era más adictivo que la vainilla.
Cuando él terminó, alzó la vista y la orgullosa, alentadora mirada en su cara le quitó el aliento. Él era tan devastadoramente hermoso, tan cálido, que la dejaba débil.
—¿Vampiros? —preguntó él.
Ella sonrió abiertamente. —Sé que es un tema extraño, pero yo sólo intento canalizarlo. Lo que me gusta es que estos son tan diferentes de otras historias de vampiros.
—Me recuerdan de algunas personas que conozco.
Ness quedó boquiabierta. —¡Vamos! ¿Tú conoces vampiros?
—Conozco a muchos de ellos.
—¿Me estás haciendo una broma? —preguntó ella con desconfianza, todavía no segura si él era serio o no. —¿Existe realmente tal cosa?
Él no contestó. En cambio dio vuelta las páginas. —Eres muy talentosa, Ness. No deberías dejar que esto se desperdiciara.
Oyéndoselo, ella casi podía creerlo. — ¿Tu crees?
—Sí, lo creo.
Él dejó las páginas de lado y la miró fijamente.
La blusa de Ness comenzó a desatarse. Ella tembló ante la oscura, hambrienta expresión en la cara de Zac mientras la miraba. Despacio, poco a poco, los cordones salieron de los agujeros. Sus pezones se endurecieron por la expectativa. Entonces, la abertura se ensanchó, desnudando un solo pecho.
—¡Hey! —protestó ella.
Él rió sin arrepentirse. —Mi parte favorita del sueño. La ropa es opcional.
Nessa siseó mientras él ahuecaba su pecho en su mano; entonces ella le hizo su propio hechizo.
Él miró su ropa nueva con un fruncimiento de ceño. —¿Qué es esto?
Ella se mordió el labio ante su traje. —Luces muy bien como pirata.
Él se rió. —Iujuuu, compañera —, dijo él, acostándola sobre la hierba. —La proa de mi barco necesita un puerto.
Ella gimió cuando él la besó. —Mi puerto necesita la proa de un barco.
 
Ellos hicieron el amor por una eternidad. Vane tuvo a Zac de cada manera que una mujer podía tener a un hombre. Ella lo tomó bajo ella, sobre ella, y detrás de ella.
Ella pasó horas recorriendo con sus manos y boca toda su gloriosa piel oscura hasta que conoció su cuerpo mejor que conocía el propio. En el final, ellos se elevaron al cielo, donde hicieron el amor mientras las estrellas centelleaban alrededor de los dos.
NesS yacía tranquilamente en sus brazos, simplemente escuchando el latido de su corazón bajo su mejilla.
—¿Zac? —preguntó ella, sentándose para mirarlo. —¿Dónde vas cuando no estás en mis sueños? ¿Visitas a otras mujeres?
Su mirada caliente la chamuscó. —No. No deseo a ninguna otra mujer.
—¿En serio?
—Lo juro.
Ella le levantó la mano y besó su palma. —¿Entonces qué haces?
Sus ojos brillaron. —Pienso en modos de hacer el amor contigo.
Ella se rió a carcajadas al pensarlo. —¿Sabes lo que quiero hacer?
—Después de la noche que hemos tenido, honestamente no puedo imaginármelo.
—Quiero mostrarte un parque de diversiones. ¿Has estado alguna vez en uno?
—No.
Cerrando sus ojos, Erin los deseó a una feria estatal.
Zac estaba horrorizado en su mundo. Las luces brillantes y música…
Acostumbrado sólo a visitar a la gente en sus pesadillas, él nunca había oído música antes. El sonido era maravilloso y cálido.
Había sólo un puñado de gente alrededor y él le dejó tomar su mano y alimentarlo con algodón de azúcar, manzanas acarameladas, torta funnel, y corn dogs.
Entre comida y comida, subieron a toda clase de juegos que hicieron que su cabeza diera vueltas. Pero no tanto como ella misma se lo hacía.
—¡Hey! —dijo ella al acercarse a otro puesto.    —Vamos a hacernos una foto. Siempre quise tener una foto de los viejos tiempos. ¿Qué dices?
—Lo que te haga feliz.
Zac le permitió disfrazarlo con un equipo del Viejo Oeste mientras ella se vestía como una muchacha de salón, pero su parte favorita fue cuando ella se sentó en su regazo donde él pudo abrazarla. Mejor todavía, el vestido que ella llevaba cayó sobre ellos, por lo que sus muslos desnudos descansaban contra su bajo vientre. Lo asombroso fue cómo de rápido su cuerpo saltó a la vida.
¿Cómo podía desear hacer el amor con ella cuando él ya había pasado horas perdido en su cuerpo? Aún así no había forma de negar el fuego que sentía. El deseo que tenía de liberarse de sus pantalones y presionar su caliente, mojado cuerpo bajo él.
—¿Estás bien? —preguntó ella, mirándolo sobre su hombro.
Él cabeceó, aun cuando su ingle ardía como el infierno.
En la primera foto, ellos estaban mejilla con mejilla. La segunda fue con ella acunada en sus brazos, y para la última ella se inclinó y besó su mejilla en el último minuto.
Ness tomó las fotos de la máquina y frunció el ceño. —Oh, por Dios! —resopló ella. —Me parezco a un premio al ridículo.
—¿Perdón?
Con ojos tristes, ella le dio las fotos. —Tú estás tan increíblemente hermoso y yo estoy regordeta, redonda, el término medio de nada.
Zac sintió como si ella le hubiera pegado. —Ness —dijo, su voz espesa. —Tú no eres, nada de eso. Eres la persona más hermosa que alguna vez he conocido.
Ella sonrió débilmente. —Eres tan dulce.
Zac la detuvo y la dio vuelta para que lo mirara. —No, no lo soy. ¿Quieres  saber lo que yo veo cuando te miro?
Ness tragó, su mirada recorriendo su cara. —Claro.
Zac le dio las fotos otra vez.
Mirándolas, Ness jadeó ante lo que veía. Su largo y negro intenso. Su cara tenía un cutis perfecto y sus ojos marrón oscuro eran brillantes y vivaces. Ella lucía impresionante.
Y así no era ella.
—¿Esto es lo que ves? —le preguntó a Zac.
Él cabeceó, su cara severa. —Es lo que eres para mí.
Ness se estiró para abrazarlo, pero antes que pudiera hacerlo, hubo un extraño zumbido.
Zac desapareció instantáneamente.
—¡No! —gimió ella mientras se despertaba con el sonido de alguien tocando su timbre.
Decepcionada al punto de la violencia, se levantó y abrió la puerta.
Ella parpadeó incrédula. Ashley estaba del otro lado...

4 comentarios:

  1. OMG!!!!!
    por dios cuantas emociones
    y que hara ashley ahi?
    que lindo zac
    pero sabes una cosa?
    me vas a dejar sin cabello!!!
    me dejas con la intriga y con ganas de mas
    que te pasa ehhh!!??
    jajaja siguela pronto amix

    baii baii
    xoxo

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  2. ahhhhhhhhh !!!!
    no te pases como la dejas asi eh !
    hahaha estuvo genial el cap !!
    me encanto!!
    me fascino !!
    pero no me gusto como zac ve a nessa ...no la vee como es realmente !
    Pero Buehhh !!!
    Me Encanta Tu Novee !!
    Siguela!!!
    Bye !
    Xx Vh !

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  3. noooooo!!!!
    ashley ¬¬
    para ke vienes pesada ¬¬
    a mi me joderia bastante ke me icieran eso
    aunke eso de vivir eternamente en un sueño no es nada bueno :S
    al final ness tendra ke olvidarse de alguien ke es imaginario v.v
    bueno siguela pronto!
    bye!
    kisses!

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  4. Awwwwwwwwwwwwwww
    Amo a Ashley pero esta interrumpiendo muchooooooo
    Noooooooooooooo
    preciso cuando estaba diciendo lo que sentia..
    siguela amix
    perdon por no comentar antes..
    :D
    me re-encanta tu nove :D

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