domingo, 20 de enero de 2013

Capitulo 10


—¡Zac, Zac! ¡Despierta! ¡Corre!
—¿Qué sucede? —Zac se despertó sobresaltado—. ¿Es el bebé? ¿Te duele algo?
Ella frunció el ceño antes de sacudir la cabeza y sonreír como si estuviera enajenada.
—Entonces, ¿por qué demonios gritas? —él se frotó los ojos y consultó la hora—. ¡Por el amor de Dios, es muy temprano!
—¡Está nevando!

Ella le agarró la mano y tiró de él. Las sábanas se deslizaron de su cuerpo y ambos se quedaron paralizados. Y entonces recordó que dormía desnudo y, peor aún, que su pene estaba haciendo acto de presencia de una manera muy poco sutil.
—Lo siento —se excusó Vanessa—. Bajaré yo sola.
—Espera un momento —Zac saltó de la cama con la sábana enrollada alrededor de la cintura—. ¿Nunca habías visto nevar?

Ella sacudió la cabeza.
—¿Hablas en serio?
—Vivo en una isla frente a la costa de Texas —Vanessa asintió—. No vemos mucha nieve allí.
—Pero no es la primera vez que viajas. ¿Nunca habías estado en un lugar en el que nevara?
—No salgo mucho de la isla —ella se encogió de hombros.

Vanessa echó una mirada cargada de ansiedad hacia la ventana, como si temiera que la nieve fuera a desaparecer de un momento a otro.
—Dame cinco minutos —Zac suspiró—. Me visto y te acompaño.
Supuso que, dado que era la primera experiencia de Vanessa con la nieve, seguramente no llevaría ropa adecuada y tomó una bufanda y un gorro.
Se vistió y cuando salió del dormitorio se encontró a Vanessa pegada a la ventana del salón.

—Toma —gruñó él—. Si vas a salir ahí fuera, necesitarás abrigarte.
Ella se volvió y miró fijamente la bufanda y el gorro que le ofrecía. Alargó una mano, pero él le colocó la bufanda alrededor del cuello y tiró de ella.
—Seguramente ni siquiera sabes atártela —murmuró. Tras colocarle la bufanda, le puso el gorro y dio un paso atrás. Estaba… monísima.
—Tu nieve espera.

Vanessa salió al pequeño patio interior del edificio, sorprendida de que no hubiera nadie más. En cuanto uno de los copos aterrizó sobre su nariz, volvió el rostro hacia el cielo y comenzó a reír con las manos extendidas y girando en círculos.
Tras formar una bola de nieve se volvió hacia Zac con una traviesa sonrisa en el rostro.
—Ni se te… —él la miró desconfiado.
Pero antes de poder terminar la frase, la bola de nieve se estrelló contra su cara.
La miró furioso, pero ella se limitó a reír mientras formaba una segunda bola.
—¡Ni hablar! —rugió Zac.
Vanessa se incorporó dispuesta a un segundo lanzamiento, pero una bola de nieve la golpeó el rostro y se deslizó por su nuca provocándole un escalofrío.
—Ya veo que no has podido resistirte —ella le dedicó una sonrisa burlona.
—¿Resistirme a qué?
—A jugar. ¿Quién puede resistirse a la nieve?
—No estaba jugando —gruñó él—. Me estaba vengando. Y ahora, vámonos. Ya has visto la nieve. Deberíamos regresar. Aquí hace frío.
—¡No me digas! Está nevando —contestó ella—. Se supone que debe hacer frío.

Ignorando el gesto de exasperación de Zac, le lanzó otra bola. Él la esquivó y le dedicó una mirada que hizo que ella buscara refugio, no sin antes recibir una bola justo entre los ojos.
—Para ser alguien que no juega en la nieve, lanzas muy bien las bolas —murmuró.
Cuando él se agachó para recoger más nieve, ella se aprovechó y le golpeó en el trasero.
—Espero que seas consciente de que esto es la guerra —declaró Zac.
—Claro, claro —ella puso los ojos en blanco—. Ya conseguí que abandonaras esa actitud prepotente una vez, y volveré a hacerlo.
Zac se aproximó a Vanessa con expresión decidida.
—Oh, oh —murmuró ella mientras reculaba.

No había mucho sitio para huir en el pequeño patio interior, a no ser que intentara entrar de nuevo en el edificio, y decidió enfrentarse a él.
A toda prisa empezó a lanzarle puñados de nieve que él esquivaba entre juramentos antes de lanzar un suspiro de resignación y hacer lo mismo con ella.
—¡Me rindo! —aulló Vanessa al fin, alzando las manos.
—¿Y por qué será que no te creo? —preguntó él mientras la miraba con desconfianza.
—Tú ganas —ella le dedicó su sonrisa más inocente y alzó las manos—. Me estoy congelando.

Zac dejó caer la bola de nieve que tenía preparada y se acercó a Vanessa, agarrándola por los hombros. La miró de arriba abajo.
Suspiró ante lo injusto de la situación. El amor de su vida la miraba como a una extraña.

—Deberíamos entrar —Zac frunció el ceño—. ¿No has traído nada de ropa para el frío?

Ella sacudió la cabeza con gesto pesaroso.

—Entonces habrá que ir de compras.
—No hará falta —de nuevo sacudió la cabeza—. Pronto regresaremos a la isla Moon y allí aún hace bastante buen tiempo.
—Y entre tanto te congelarás. Al menos necesitarás un abrigo. ¿Tienes alguna preferencia? ¿Piel? ¿Cuero?
—Sólo un abrigo. Nada exótico.
—Yo me ocuparé.
—Haz lo que quieras —ella se encogió de hombros.

—Cuando el portero me dijo que estabas aquí fuera jugando con la nieve, le pregunté si el verdadero Zac había sido abducido por unos alienígenas.
Vanessa y Zac se dieron la vuelta y vieron a Devon Carter apoyado contra una farola.
—Muy gracioso —murmuró Zac—. ¿Qué haces aquí? —tomó a Vanessa de la mano.
—Sólo quería ver cómo estabais —Devon arqueó una ceja—. He oído que ayer hubo jaleo.

Vanessa hizo una mueca y se llevó la mano libre al moretón que ya había olvidado.

—Como puedes ver, está bien —declaró Zac—. Y ahora, si nos disculpas, nos vamos arriba.
—En realidad he venido a verte a ti —Devon sonrió—. Ella me parece muy capaz de cuidarse.

Vanessa carraspeó. Devon no estaba preocupado por ella sino porque Zac quedara atrapado en sus garras.
—Me subo arriba, así os dejo charlar tranquilamente.

Tras saludar con la mano a Devon, Vanessa corrió hacia el ascensor.

—¿De qué va todo esto? —Zac se volvió hacia su amigo con el ceño fruncido.
—Sólo quería ver cómo estabas —Devon se encogió de hombros—. Estos dos últimos días te han pasado muchas cosas y quería saber si empezabas a recordar algo.
—Vamos dentro —Zac hizo una mueca de desagrado—, aquí hace frío.

Los dos amigos entraron en la cafetería del vestíbulo principal.

—Todo va bien. No quiero que te preocupes, ni que empieces a conspirar para protegerme.
—¿Aunque opine que tu idea de volar a esa isla es una estupidez? —Devon suspiró.
—Sobre todo por eso.
—¿De verdad crees que es buena idea marcharte con esa mujer que afirma estar embarazada de ti? A mí me parece que lo más sensato sería llamar a tu abogado, solicitar una prueba de paternidad y mantenerte al margen hasta tener los resultados.
—Creo que ya le he hecho bastante daño —Zac sacudió la cabeza—. ¿Cómo voy a reparar un error si mi abogado la agobia mientras esperamos saber si voy a ser padre?
—A mí me parece que ya has decidido que dice la verdad —Devon soltó un suspiro.
—No sé cuál es la verdad. Mi cabeza me dice que no puede ser cierto. Que la idea de enamorarme locamente de ella en unas semanas es absurda.
—¿Pero…?
—Pero mi corazón aúlla que hay algo entre nosotros. Cuando estoy cerca de ella, cuando la toco… me convierto en otra persona. Percibo la convicción en su voz cuando me cuenta cómo hacíamos el amor junto al mar, y la creo. Quiero creerla.
—De modo que la crees —Devon soltó un silbido.
—Mi mente dice que es una mentirosa —Zac contuvo la respiración.
—¿Pero tu corazón?

Zac suspiró porque sabía adónde quería llegar su amigo. Él siempre se guiaba por el corazón, aunque la lógica le aconsejara lo contrario. Y jamás se había equivocado.
—Mi corazón me dice que no miente.

3 comentarios:

  1. WOW WOW Y MAS WOW.
    ME ENCANTOOOOOO MUCHO MUCHO..

    ZAC SE DIO CUENTA QUE SU CORAZON QUIERE A VANESSA, Y ESO ES MUUY BUENOOO :)
    Y SABE QUE VANESSA NO MIENTE, Y ES SUPER GENIAL.
    AAUNQUE SIGO PENSANDO EN POBRE VANESSA, SON DEMASIADOS CAMBIOS PARA ELLA Y ENCIMA EMBARAZADA, ESPERO QUE ZAC LA RECUERDE PRONTO :)

    SUBE PRONTO.
    BESO

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  2. Zac no recuerda, pero siente que Vanessa dice la verdad,
    espero y recupere pronto la memoria,
    hay algo raro en los amigos de Zac.. jum
    siguela :)

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  3. ke mono zacky
    ya me empieza a caer mejor ^_^
    pero su amigo no ¬¬
    me a encantado ness con la nieve
    se parece a mi XD
    donde yo vivo rara vez nieva cada muchos años
    bueno, en mi casa XD
    porke en la montaña si nieva
    bueno ke me voy del tema y eso seguramente te de igual XD
    siguela pronto ke me encanta la nove
    esta guay
    bye!
    kisses!

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